La reciente Audiencia Pública de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación celebrada en Lima, del nueve al once de septiembre abre dolorosas heridas de la historia peruana con el objetivo de que al sacar a la luz los sufrimientos y torturas que vivieron las mujeres de Perú, principalmente de la sierra y de la selva, entre 1980 y el año 2.000.

El programa comenzó con un seminario internacional, en el cual intervinieron tres ponentes Madeleine Desnoyers como agente regional para las Américas en Derechos y Democracia y otras dos expositoras: Juana Catinac y Miriam Cuyum de la Defensoría de la Mujer en Guatemala. Sus palabras y la experiencia vivida por la Comisión de la Verdad en su país sirvieron tanto de orientación como de apoyo.

El segundo día se escuchó la dureza de las palabras de los siete testimonios de mujeres: Rosario Hidalgo, Feliciana Quispe, Celestina Flores, Sonia Elizabeth, María Cecilia, Marina Janampa, Dorisa Ccellccasca quienes narraron en primera persona todas las atrocidades a las que fueron sometidas por los militares, la policía y Sendero Luminoso. El horror y la crudeza del recuerdo de lo vivido provocó el desmayo de María Cecilia, lo que desencadenó emotivas reacciones en el público asistente."Que no se vuelva a repetir" eran las palabras de Sonia que recogen la esperanza de todas y de todos.

La Audiencia Pública finalizó con la intención de buscar la responsabilidad del Estado. Las ponentes representantes del Estado y de la sociedad civil denunciaron la actual situación de la mujer en la que se repite las mismas circunstancias discriminatorias por razón de género que convierten a la mujer en un ciudadano de segunda categoría. La sensibilización, la educación sexual y reformas tanto a judicial como a nivel conductual, necesitan una nueva mentalidad.

(Informe : María Fuster - OTC)